Un premio Darwin por pelotas

(Abril 2017, Argentina)

«Castigo divino»

dijo el juez, al decidir no encarcelar a un hombre que se disparó en los testículos mientras llevaba un arma ilegal en la cintura. El hombre perdió sus «joyas de la corona», es decir, sus testículos además de su trabajo como guardia de seguridad, y se enfrentó a años de prisión hasta que el tribunal dictaminó que ya había sido castigado por una autoridad superior. ¿Hablamos del Karma?

Se reportó en dos  de los más importantes periódicos de Argentina, Clarín y La Nación. Aquí no citaremos el nombre de este Ganador del un Premio Darwin Viviente. Los puestos de trabajo son escasos en la ciudad de Buenos Aires, y la pistola Colt de calibre 45 no registrada le fue entregada como parte de su trabajo de seguridad, creando una tragedia dentro de una tragedia.

1 comentario en “Un premio Darwin por pelotas

Comenta qué te ha parecido esta historia